Este es el blog. Y esta es nuestra web, está todo más ordenadito, mejor.

19 de septiembre de 2014

Un mundo mejor es posible (33) En Portada y el alma de Berik

Una vez más, los magníficos periodistas que hacen posible En Portada, un programa fundamental de nuestra televisión pública, demuestran por qué el periodismo de investigación y denuncia que practican está imbricado con descubrirnos las realidades que han sucedido y suceden en el mundo, a veces implicándose personalmente en ellas. Una de esas historias les condujo hace unos meses a investigar las consecuencias de las pruebas atómicas de la antigua Unión Soviética (la actual Kazajistán) en las personas que vivían cercanos a los campos de pruebas, en reportaje 'Hijos de la guerra atómica', uno de los más premiados de los últimos años. El eje de ese reportaje fue Berik Syzdikov, un joven con el rostro deformado por bultos cancerígenos seguramente provocados por aquellas pruebas. Sin embargo, una vez terminado aquel trabajo e impactados por la historia de Berik, José Antonio Guardiola (director del programa), el realizador Miguel Ángel Viñas y Carlos Franganillo (en aquel momento corresponsal de TVE en Rusia) usaron el dinero de varios premios recibidos para traer a Berik a Madrid y que pudiera ser sometido a una operación quirúrgica que al menos paliara los terribles efectos que en su rostro dejó aquella radiación fatal.

En Portada. "El alma de Berik"

José Antonio Guardiola 16.09.2014


Berik es un tipo que estrecha la mano con fuerza. No rehúye el abrazo, al contrario, lo busca. Berik es un tipo anegado de mala suerte en su vida. Aparentemente alegre, pero azotado por una fuerte marejada interior.

El origen del reportaje

El rodaje de El alma de Berik fue una experiencia que nos descosió como periodistas. La involucración con el personaje y su drama, vivida día a día en nuestra propia ciudad, en nuestra propia casa, desbordó los límites que habitualmente nos marcamos en nuestra profesión. No hay arrepentimiento. Sólo reconocimiento de que en este caso nos dejamos impactar más que en otras ocasiones por la tragedia de nuestros “personajes”.

Todo comienza hace casi dos años. Por razones diferentes, Carlos Franganillo y Miguel Ángel Viñas entienden que la vida de Berik debe reflejarse en un reportaje de En Portada. Así lo hicimos y se tituló Hijos de la guerra atómica. Un gran trabajo que mereció la medalla de oro del festival de Nueva York. Lo estrenamos el 19 de septiembre de 2013. Apenas unos días después de su estreno, llama a la redacción el cirujano Christian Weigand. Su propuesta es clara: si lográis traer a Berik a España yo le opero. Suena fácil, pero a partir de ese momento todo son complicaciones.

Preguntas, cuentas y golpes de suerte

Primera pregunta: ¿Y eso cuánto cuesta? Segunda: ¿Querrá venir Berik? Tercera: ¿Sus tumores serán operables? ¿Le curaremos o simplemente mejoraremos su aspecto? 

-Guardiola: ¿Carlos? Creo que tenemos presupuesto. Nos acaban de dar un premio justo de 5.000 euros. Y hubo una quinta, y una sexta… Y todas las preguntas que nos hacíamos nos devolvían a la primera. Cuánto cuesta. Hicimos un cálculo y determinamos que no saldría por menos de 5.000 euros aprovechándonos de la desinteresada colaboración de Weigand y la clínica en la que opera, la Ruber de Madrid. Ahí surgió el primer golpe de suerte. Durante esos días nos concedieron el premio Defensa de Televisión por el reportaje AMENAZAcyber. Dotación económica: 5.000 euros.

-Franganillo: Fenomenal. Pues si te parece, llamo a Berik y le comento que existe la posibilidad de llevarle a España para operarle…

Berik llega a Madrid en los primeros días de abril. En apenas una mañana se le realizan todas las pruebas preoperatorias, un escáner cerebral, un historial genético… Por fin tiene un diagnóstico claro: neorofibromatosis. A bote pronto y en pocas palabras: Su enfermedad no tiene cura, sólo se puede aspirar a mejorar su aspecto, a reducir el tamaño de esos tumores que le tienen recluido en su casa de Semey.

Complicaciones, presupuestos que se disparan y ¿un final feliz?

Según pasan las semanas, todo se complica. Los riesgos se disparan, las seguridades se derrumban, las dudas nos arrinconan y nos llevan a pensar que el esfuerzo no habrá servido de nada y habrá que devolver a Berik a su Kazajistán tal como llegó a España… El presupuesto se desborda. Franganillo decide destinar al proyecto parte de la dotación de su Salvador de Madariaga. Y es en ese preciso instante en el que surge la figura casi providencial del padre Ángel. 

El presidente de Mensajeros de la Paz acude una tarde de mayo al apartamento del barrio madrileño de Legazpi que hemos alquilado para Berik y su madre. Le estrecha la mano, conversan. Berik decide dedicarle su canción favorita. Se encariñan. “Guardiola –concluye el padre Ángel-, a Berik no le devolvemos así a su país. Le operamos aquí como sea”. Y así fue y de eso trata nuestro reportaje.

Tuve muchas conversaciones con mi ya amigo Berik. Y en casi todas ellas me recordaba cuánto le irritaba que los niños de su barrio se rieran de su desgracia. “Si al menos me pudiera quitar estos bultos y poner gafas de sol…” Hasta aquí quiero escribir, quien quiera saber si Berik utiliza hoy gafas de sol que vea El alma de Berik.


Cómo se hizo 'El alma de Berik'